Ir al contenido principal

Bernardo C. Ranalletti


Bernardo C. Ranalletti nació el 10 de agosto de 1933 en Colonia Carolina, departamento de Goya, provincia de Corrientes.
Sus padres Arnaldo Ranaletti y Roma Herminia Santajuliana constituyeron una humilde familia tabacalera, donde Bernardo fue el segundo de nueve hermanos.
Sus estudios primarios los cursó en la ciudad de Goya; en tanto que los secundarios en la capital correntina y en la Universidad Nacional de La Plata estudió Literatura.
En el Certamen Bodas de Oro de la Asociación de Maestros de Corrientes, en el año 1959, obtuvo el tercer premio nacional en poesía; género en que alcanzó seis primeros premios en diversos concursos desarrollados en el ámbito de la provincia de Corrientes. “Tiempo de fogatas” se titula un libro inédito de poesía de su autoría.
Como ensayista obtuvo también importantes reconocimientos, como por ejemplo del Centro de Investigaciones Estilísticas de la Universidad de La Plata. “Virgilio y el Impresionismo”, “Dante entre los viajeros inmortales” y “El río, tema lírico”, son títulos de breves ensayos publicados. En tanto, “Qué es la Tradición”, “Poesía y Política” y “La muerte de Lugones”, son parte de sus ensayos inéditos.
Además obtuvo varias menciones de honor, una de ellas en el rubro “Cuento”.
Autor de “Historia de una Pasión Correntina” y “Antología Poética”, ambos referidos a la obra poética de Franklin Rúveda.
Sugirió y gestionó la 2da. Edición de “Orígenes y Leyes del Lenguaje aplicadas al Idioma Guaraní”, de T. Alfredo Martínez. Además concluyó un libro titulado “Un Correntino Universal: T. Alfredo Martínez”, (insigne filólogo y guaranista; premio nacional en 1916).
Tres poemas suyos han sido musicalizados (chamamé) por Julio Cáceres y grabados por “Los de Imaguaré”.
Fue promotor y redactor de la Ley Provincial de Bibliotecas de Autores Correntinos; y entre otros autores, promotor del Museo Regional de Goya y la Casa de la Cultura. En esta última, un Salón de Actos lleva su nombre. Aquí mismo fue reconocido por su trayectoria, con la plaqueta mención “Pedro Pascasio Enríquez”, el 28 de octubre de 2005.

 Ensayista, poeta, investigador del folklore nordestino, “prologista”…,  Bernardo C. Ranalletti falleció a los 75 años en Posadas, provincia de Misiones, el 24 de noviembre de 2008.


Recopilación informativa de Micaela Palachi complementada con datos extraídos del libro "Florilegio Goyano I", de Ramón Orlando Mendoza (pág.278).

Comentarios

Entradas populares de este blog

La Comunicación Interpersonal: Aspecto No Verbal

La comunicación no verbal se realiza a través de multitud de signos: imágenes sensoriales*, sonidos, gestos, movimientos corporales, etc. Generalmente, acompaña, completa, modifica o sustituye al lenguaje verbal. Cuando hablamos, otras señales acompañan a nuestras palabras, aunque no seamos muchas veces conscientes de ello. Estas señales son la entonación, las pausas, los gestos, las posturas, etc. Incluso podríamos decir que en una conversación cara a cara el componente verbal es un 35% y un 65% es comunicación no verbal. Este 65% de elementos no lingüísticos que acompañan a la comunicación verbal pueden desempeñar varias funciones en el proceso de la comunicación. Pueden confirmar o reforzar lo que dicen nuestras palabras , como ocurre cuando decimos “ Sí” y movemos la cabeza de arriba abajo. En otras ocasiones, pueden contradecir lo que se está diciendo , como cuando reaccionamos ante un chiste que nos parece muy malo con la expresión ¡Qué gracioso! Utilizando una determinada

"Comunicación Animal y Lenguaje Humano"

La observación del comportamiento de los animales demuestra que poseen un código específico de señalización. Se trata de un sistema de comunicación altamente desarrollado. Por ejemplo, las diversas posturas corporales para indicar agresividad o sociabilidad, los diferentes gritos y los cantos de las aves, en distintos niveles, permiten hablar tanto de comunicación gestual como de comunicación vocal. Sin embargo, no puede hablarse de lenguaje animal, porque faltan las condiciones fundamentales de una comunicación propiamente lingüística. Si se observa la danza de las abejas cuando, después de haber libado, regresan a su colmena, puede constatarse una comunicación gestual. En efecto, cuando una de ellas descubre una fuente de alimento, ejecuta ante los demás habitantes de la colmena, una danza que indica el exacto emplazamiento de la flor de donde vuelve. Poco tiempo después, llegan las otras abejas a la misma flor. Estas danzas que disponen de dos componentes esenciales, como los

6 de enero: San Baltazar

San Baltazar, el rey de oscura tez que fue testigo del nacimiento de Cristo, tiene sus devotos en Goya y, como cada 6 de enero, se reúnen para honrarlo en casa de la familia Piriz. La imagen de Baltazar está tallada en madera y tiene más de 300 años, aunque  no se sabe con certeza de dónde provino ni cuándo comenzó esta devoción en nuestra ciudad.  Lo cierto es que en 1926 la imagen fue donada a los herederos de don Alberto Morales y estos, allá por 1950, la entregan a Polonia Oviedo de Piriz para dar continuidad a una tradicional devoción popular. Así, a través de varias generaciones, “los Piriz” llevan adelante esta misión desde hace más de 70 años. La fiesta al “santo moreno” tuvo sus años gloriosos pero actualmente está en notable descenso su popularidad. Por eso, con el propósito de avivar la llama de la fe y preservar esta manifestación cultural, la municipalidad de Goya a través de la dirección de Cultura la declaró “de interés cultural” en 2006 y contribuyó con la realiza