El 3 de abril de 1588, el adelantado español
Don Juan Torres de Vera y Aragón funda la ciudad de San Juan de Vera de las
Siete Corrientes. Que en la actualidad, el uso lo redujo simplemente a
Corrientes.
Los colonizadores inmediatamente levantaron
una alta cerca de madera, en torno de la nueva población. Fuera de ella clavaron
una cruz de ñandubay, una madera que se caracteriza por su dureza.
La tradición recuerda que a poco tiempo de ser
fundado, la población fue atacada por los indígenas nativos.
Este suceso, considerado milagroso, marca un momento clave en el proceso de cristianización de los aborígenes nativos.
La auténtica cruz incombustible se exhibe y
honra en la Iglesia
de la Santísima Cruz
de los Milagros.
Su festividad se celebra el 3 de mayo. A su
procesión concurren las imágenes patronas de las poblaciones vecinas. Y en la
ciudad se encienden velas en las ventanas, puertas, sobre los muros, etc.
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